miércoles, 15 de agosto de 2007

DESENCRIPTADO

Repasando anoche viejas charlas de messenger, horrorizada por mi evidente sentimentalismo, amargada, sola y aburrida, concluí que el carácter es una entidad irreversible. Que no es algo que una pueda “forjar”, como me malenseñaban mis padres, las maestras y las monjas cuando era una niña. Que está imborrablemente inscripto en el ADN, que te lo imprime el Falaz Alfarero en la génesis de la Comedia Universal (como el ombligo, como el sexo, como el destino, como la conciencia). Por tanto, he perdido tiempo y energía estudiando con denuedo los manuales de moralidad, he hecho el hazmerreír de los mandamases aprendiendo trucos de éxito y tablas de valores. Mejor hubiera sido, a cambio del pago mensual de la cuota en los institutos privados, adquirir un atractivo catálogo de tipos predeterminados de personalidad, para que me reconozca, me encasille en alguno y me resigne a mi suerte, sin tanta alharaca de angustia. Y no ese sudor intelectual y emocional que conlleva toda “educación personalizada”, que no es tal, que es un producto comercial tan artificial como las ciencias de la conducta, la religión, las flores de plástico y el agua corriente.
Si aún no se me entiende, inténtese canturrear este rock en tono interrogativo y sin prejuicios.

8 comentarios:

Livio dijo...

Ja! supongo que lo q se forjan son los hábitos y no los de monja precisamente

GISOFANIA dijo...

ni siquiera. lo único que he ido construyendo en mi vida son castillos góticos de manías.

caramba! ahora que lo pienso, en eso las monjas han sido todo un referente

Amperio dijo...

No me critique a las monjitas, compañera, que sin ellas mi vida hubiera sido distinta. La patada en los tobillos a la Madre Superiora, a mis cortitos siete años me abrió, aunque Ud. no lo crea, el camino de la herejía feliz.

GISOFANIA dijo...

jajajaja. me hubiera gustado estar ahí para verlo, cumpa.
y siempre es más feliz un hereje que un apóstata.

Alyxandria Faderland dijo...

Por ser la primera AMIGA que conoci por esta via, la invito a que me escriba algo acerca de que le sugieren los textos goticos, o negros (aunque este ultimo esta casi a punto de caramelo...).
O algo dark, quien sabe, a lo mejor asi se matan los demonios!

GISOFANIA dijo...

Lady Z: no entendí muy bien la consigna. ¿sería tan amable de explicármela vía mail?
gracias!

cipriano dijo...

Hay fragmentos de palabras
adentro de todas las cosas,
como restos de una antigua siembra.

Para poder hallarlos
es preciso recuperar el balbuceo
del comienzo o el fin.
Y desde el olvido de los nombres
aprender otra vez a deletrear las palabras,
pero desde atrás de las letras.

Quizá descubramos entonces
que no es necesario completar esos fragmentos,
porque cada uno es una palabra entera,
una palabra de un lenguaje olvidado.

Y hasta es posible que encontremos en cada cosa
un texto completo,
un reservado y protegido texto
que no es preciso leer para entender.

Roberto Juarroz

GISOFANIA dijo...

hermoso, Cipriano.
agradecida...