domingo, 1 de junio de 2008

FESTIVAL

Lo más común, vulgar, próximo y simple,
eso soy Yo,
Yo, buscando mi oportunidad, brindándome
para recibir amplia recompensa,
engalanándome para entregar mi ser
al primero que haya de tomarlo,
sin pedir al cielo que descienda cuando yo lo deseo,
esparciéndolo libremente para siempre.
WALT WHITMAN




Se acerca. Se siente. Se desea.
Cuando el extravío de los próximamente,
la perversidad del ya,
las confusas promesas,
resolveré concluir este letargo.
Me festejaré,
pronunciaré loas a la grandeza de mis células,
cabalgaré en mis inconsistencias,
haré la paz con mi alma,
comulgaré conmigo.
Vengo presta para entonces.
Tengo un reservorio de júbilos,
explosiones vitales preparatorias,
varios ensayos de apoteosis del ego.
Es inminente que ocurra:
mis huesos se sienten serpentinas
la sangre anárquica puja
la autoliberación se vuelve incontinente.

Que se quiebre el karma,
que vuele en pedazos el núcleo de tanta soledad.
¿Te hallaré allí, cuando suene la fanfarria individualista?

Yo creo.
Yo quiero.
Yo espero por mí.

2 comentarios:

antiprímula dijo...

Hola Gisofania.
¡Qué lindo lo de Walt!
Te dejo un regalo virtual, un poema de Susana Thenon, se llama "Canto nupcial", o algo así:
***
me he casado
me he casado conmigo
me he dado el sí
un sí que tardó años en llegar
años de sufrimientos indecibles
de llorar con la lluvia
de encerrarme en la pieza
porque yo -el gran amor de mi existencia-
no me llamaba
no me escribía
no me visitaba
y a veces cuando juntaba yo el coraje de llamarme
para decirme: hola ¿estoy bien?
yo me hacía negar
llegué incluso a escribirme en una lista de clavos
a los que no quería conectarme
porque daban la lata
porque me perseguían
porque me acorralaban
porque me reventaban
al final ni disimulaba yo
cuando yo me requería
me daba a entender
finamente
que me tenía podrida
y una vez dejé de llamarme
y dejé de llamarme
y pasó tanto tiempo que me extrañé
entonces dije
¿cuánto hace que no me llamo?
añares
debe de hacer añares
y me llamé y atendí yo y no podía creerlo
porque aunque parezca mentira
no había cicatrizado
solo me había ido en sangre
entonces me dije: hola ¿soy yo?
soy yo, my life, y añadí:
hace muchísimo que no sabemos nada
yo de mí ni mí de yo
¿quiero venir a casa?
sí, dije yo
y volvimos a encontrarnos
con paz
yo me sentía bien junto conmigo
igual que yo
que me sentía bien junto conmigo
y así
de un día para el otro
me casé y me casé
y estoy junto
y ni la muerte puede separarme
***
Felicidad, calma y encuentro. (Mis deseos para junio).

GISOFANIA dijo...

gracias, querida, por tu calidez.
¿puedo copiarte y desearte lo mismo?